Después de 6 años de silencio, nuestros 4 primates musicales favoritos se reúnen para oficializar el lanzamiento de su nuevo disco este año. Para un fan de la banda, lo mejor que se puede hacer para copar con la ansiedad y la espera, es especular.
Cuando era niño, allá por el inicio de los 2000, recuerdo que mis amigos y yo tripéabamos como locos unos dibujos animados extraños de unos monos antropomorfos dándole a mil a una autopista que parecía sacada de nuestro set de Hot Wheels. Al final del video se topaban con un alce gigantesco que les trababa el camino y los hacía explotar. Más de 15 años han pasado desde ese momento mítico en la niñez, y ahora uno espera con la misma emoción infantil la nueva entrega de sus dibujos animados favoritos: el-nuevo-disco-de-GORILLAZ.
En conmemoración de esta magna noticia es justo y necesario recordar la trayectoria de la banda virtual más famosa del mundo y especular sobre las sorpresas que nos revela su evolución.
«Phase 4»
Todavía no tenemos un nombre con el cual llamar a la última creación de Gorillaz, pero desde ya, la banda ha sabido despertar nuestra emoción y ponernos a elucubrar locuras en nuestra cabeza sobre las cosas que alberga, gracias a las ingeniosas campañas de expectativa que han venido soltando en internet desde hace meses. Poco a poco, adquirimos más pistas para ir construyendo en nuestra imaginación los sonidos y las imágenes que vendrán con este nuevo álbum.
«Phase 4»
Gorillaz tiene una mitología, con todo el peso del término. Desde que la banda apareció ha protagonizado una historia salvaje que da un nuevo giro inesperado con cada disco que sale. Tal y como lo conocemos, el último episodio vivido por los personajes se dio en el 2010, con su disco Plastic Beach, ambientado en una isla hecha de basura y plástico que estaba perdida en algún lugar del Pacífico. Allá habían llegado a grabar refugiándose de un ataque terrorista y una persecución que causó su separación y destruyó su mansión, el estudio «Kong». No obstante, después de sacar el disco, fueron alcanzados por piratas y debieron huir nuevamente antes de ver sus caminos reencontrados a finales del año pasado. Así dan inicio a una nueva etapa de su música y de sus vidas, lo que ahora conocemos como «Phase 4».
Hacia octubre de 2016 aparecieron sus historias en una serie de «libros«, donde nos contaban cómo cada uno de los miembros de la banda había escapado al ataque de Plastic Beach y llegado al encuentro común que se dio en una nueva casa en el oeste de Londres.
Murdoc fue interceptado en medio del mar por un buque de la disquera EMI, mientras navegaba en un submarino oxidado y pestilente con un cyborg de Noodle. 2-D sobrevivió en el estómago de una ballena llamada «Massive Dick», antes de quedar varado en una playa mexicana donde se dio un año sabático tejiendo pulseras de la amistad. Russel, que había intentado llegar nadando a Plastic Beach con la verdadera Noodle en su espalda, fue herido accidentalmente con un arpón para luego encallar en Corea del Norte, donde fue exhibido como una especie de Godzilla debido al tamaño sobrehumano que adquirió en el mar. Una vez que volvió a su tamaño normal lo liberaron y regresó a Londres donde eventualmente se encontró con Murdoc. Noodle terminó en una aldea en Japón, donde fue revivida por un buzo cazador de perlas; después fue en búsqueda de un antiguo demonio japonés al que liberó por accidente y al asesinarlo debió huir auto-empacándose en una caja de Fed-X destinada al estudio donde la esperaba Murdoc.
Murdoc / Ilustración de Jamie Hewlett
Desde entonces, la banda se ha dedicado a dar entrevistas, entregarnos playlists, y a aparecer en campañas publicitarias sin revelar ningún detalle de lo que se viene en el nuevo disco, dejando que nos imaginemos solos cómo debe ser la vida en su nueva casa-estudio. Quizás tan decadente como todo aquello que nos mostraron en MTV Cribs, de cuando grababan en Kong Studios. Quizás mucho más ordenado. Quizás marcado por las diferencias que sembró en ellos el distanciamiento después de los ataques piratas y el rencor que les pudo haber generado el abandono y el egocentrismo de Murdoc.
Nos queda también la duda de saber qué pasó en verdad con ellos cuando salió The Fall, su último disco antes del hiato o qué significó todo lo que vimos en el video de «Do Ya Thing«, una canción en la que participó también Andre 3000 de Outkast, en lo que pareció ser una especie de colaboración publicitaria con Converse.
Aún no sabemos nada, y tal vez nunca lleguemos a saber qué hubo con ellos detrás de esos episodios apartados. Sin embargo, intuimos con lo poco que hemos visto, que últimamente andan dedicados a construir cada uno una nueva faceta de súper-estrella y que los últimos acontecimientos políticos del mundo no les han pasado desapercibidos.
New Soundz
De vuelta en el mundo real, nos queda imaginar qué podría pasar en cuanto a la música del proyecto. Si no fuese por el estreno de «Hallelujah Money», su último single, todavía no tendríamos la menor idea de a qué sonaría el disco. Antes de sumergirnos en lo que revela este nuevo tema, cabe especular un poco más sobre la base de los rumores y las cosas que sabíamos previamente.
Sabíamos, gracias al internet, que Damon Albarn supuestamente perdió parte del material del nuevo disco en un taxi. Como se intuye por el mensaje de su amigo Mark Dugdale en la captura de pantalla, no pudo recuperarlo, ni siquiera después de 4 días de búsqueda. Nos sería difícil saber si esto fue una estrategia de marketing camuflada de anécdota, o en caso de que no, saber cuál fue el paradero de ese material.
No obstante, parece que el traspié fue superado y ahora nos queda imaginarnos qué colaboraciones encontraremos en el disco, considerando que la plantilla de artistas invitados que han acompañado a Gorillaz desde el inicio ha sido una parte fundamental de su música.
Junto a ellos han cantado nombres como MF-Doom, Bobby Womack, Little Dragon, Snoop Dogg, Lou Reed y hasta el mismísmo Ibrahim Ferrer del Buena Vista Social Club. Su discografía entera podría descomponerse en dos partes, en canciones donde el artista invitado es la voz principal del tema, y otra en la que no aparece ningún «músico real» y podemos creernos que en verdad Murdoc está en el bajo, Russell está en la batería, Noodle en la guitarra y 2-D, en las voces.
En ese sentido, es coherente pensar que seguramente De La Soul le pondrá voz a algún tema del nuevo álbum, más aún considerando que Albarn apareció en el último disco del trío de rap, estrenado el año pasado. También sería plausible pensar que Snoop Dogg volvería a cantar con ellos, después de su breve paso por Plastic Beach. Esto, considerando que la banda ya tiene una relación de tiempo atrás con el rapero y que él particularmente tiene un historial largo de featurings en su carrera. No obstante, el rumor más candente tiene que ver con David Bowie.
David Bowie intervenido por Jamie Hewlett
Según sueltan las malas lenguas, la leyenda británica podría ser uno de los invitados de más alto calibre en aparecer en el nuevo disco. Así lo asegura esta noticia que data de diciembre de 2015, poco tiempo antes de que el músico nos dejara para ir a volar eternamente como Ziggy Stardust.
Ahora bien, regresando a lo que revela el último single de la banda, protagonizado por Benjamin Clementine con su voz ominosa, podemos adivinar que el disco propone una especie de retorno a las raíces, con sonidos electrónicos y poperos que coquetean con el hip hop. No obstante, la nueva música de Gorillaz también se deja ver más industrial, sugiriendo que la banda entra en una etapa más «madura» o más «oscura», y que tal vez se aleja de los sonidos más joviales y «funkies» que nos dieron con Plastic Beach.
Hallelujah Money
La primera probadita oficial del nuevo disco de Gorillaz causa opiniones encontradas entre la fanaticada. Será el particular tono de voz de Clementine lo que complica la recepción del público o las claras referencias a la toma de posesión de Donald Trump y la polémica que ello causa.
Muchos seguidores parecen haberse sorprendido de que Gorillaz tome un tono tan político de repente y se salga tanto de su mundo fantástico. No obstante, esto no es realmente nuevo para la banda. Bastaría con volver a ver el video de «Feel Good Inc.», el de «Dirty Harry», o revisar todo el concepto de Plastic Beach para notar cómo es que llevan tiempo cantándole las verdades al mundo, desde los daños que nos hace la industrialización hasta la guerra de Iraq y nuestros atentados contra el medio ambiente, refugiados en la trinchera de su mundo paralelo.
No obstante, esta vez el lenguaje es distinto y por eso se hace chocante. Si bien antes lo habían hecho sin ser mayormente explícitos, esta vez rompieron el molde para protestar. Pusieron a Clementine en lo que parece ser la Torre Trump e inundaron el video con un montón críptico de imágenes de archivo. La canción casi parecería ser del poeta británico cantando sobre las amenazas que se le vienen a un mundo donde «la solución es construir muros». Sino fuese porque 2-D aparece eventualmente como un títere de sombras para para preguntarnos en el coro cómo «sabremos si al despertar todavía somos humanos», podría costarnos distinguir dónde está Gorillaz.
La canción nos deja un sabor picante en la boca. Ni dulce ni amargo. Nos pica por saber qué más cosas revelará la banda, qué hay detrás de las sombras que se pasean por su último videoclip. Nos pica por ver qué tanto han decidido mezclarse con el mundo real y qué tanto van a salirse del molde de su fantasía para involucrarse en lo que está pasando hoy en día. Nosotros no podemos esperar, y como sea estamos seguros de que lo que venga estará cargado del mismo magnetismo con el que esta banda nos ha jalado a borrar la línea entre verdad y ficción con su música, desde que muchos de nosotros éramos niños.
Para amenizar la espera, les dejamos este playlist de 10 canciones no tan populares de la banda, que recorren su discografía desde lo primero hasta lo último, en las que exploran su propia voz y la del abanico de artistas que los han acompañado. ¡Gócenla que la nueva era de Gorillaz ha empezado!
Dato Curioso: Carlos Bohórquez de Mamá Soy Demente nos contó hace tiempo en una entrevista, que la nueva música de su banda viene parecida a la de Gorillaz, tanto por su estilo, como por el tono de protesta, dado que ahora que «el mundo se está yendo a la mierda».
